viernes, 28 de septiembre de 2018

Oración de renacimiento

Cuando renazca de esta muerte, nuevamente, no perderé un segundo para decir lo justo, lo coherente, lo evidente; diré de lo absurdo del hambre, de lo imposible de la pobreza; no dudaré en señalar al angurriento, al violento o a la que la vio lenta, a toda persona que se queje, o se oculte, o tema, y les diré lo q saben que existe de forma evidente: que es su odio y su temor a si mismos o a sus cercanos lo que daña a las demás personas y a la Tierra, cuando éstas son culpadas de su temor a la vida, y que saben que así siguen (o seguimos) sacrificando la inocencia, y que evaden o lo niegan, como el secreto que oculta el violador de la vida que ha sido violado y asi a la muerte queda pegado. Y diré q es un engaño q digan que hay que esperar para dejar de envenenar a niños y niñas; buscaré a los responsables, a los estúpidos que no saben lo que hacen materialmente y a los pervertidos que leen etiquetas y diarios y manipulan al necesitado para que hagan lo q ellos no se atreven ni material ni simbólica-mente (la vida les cuesta dinero, x eso robarla, x eso comprarla, x eso venderla y venda(r)la), y al estúpido le reflejaré sus síntomas en las fotos de Fabián Tomassi y le diré que su patrón o patrona ya lo saben y no se lo dicen para ganar más plata, y que la justicia no existe, sólo hay decir la verdad a la cara y que entonces mucha gente apoyará su cambio y su causa; y les diré a los leídos, literatos y letrados que deben pedir perdón a quienes enfermaron, y que deben trabajar para reparar el daño causado, a una madre, a un padre, a una abuela, o a un hijo, o hermano... cualquier envenenado, aunque su vida no pueda tener otro sentido, aunque ya no puedan cambiar la camioneta, ni invertir en negocios inmobiliarios, ni hacer campañas electorales que les dupliquen la renta, aunque ya ni puedan viajar a miami con pasaje regalado, o no tengan ni una semana para aprovechar la promo de un crucero por vender o comprar un producto importado... ya nada de eso, les diré basta; sólo deberán esforzarse a aprender el oficio cotidiano de ser humanos, aunque les cueste la vida que nunca valoraron, la comprometida y amante de lo vital y vivo, esa que nunca apreciaron.

No hay comentarios: