jueves, 29 de diciembre de 2016

Plasmético 01

PLASMA de POESÍA (o Poema plasmado)

Empiezo a entender las piezas.
Me vuelvo una en este juego que rompecabezas.
El juego las rompe o las repara.
Sí, las re para: las hace parar.
Para las cabezas y las personas.
Algunas se paran de cabezas.

Se plasma una poesía.
Como puede ser una persona o una canción.
Todo se plasma, es inevitable.
Porque todo es plasma.
Plasmático o plasmática.
Es una corriente que corre por el poema.
Antes de ser poema fue plasma, fue poesía.
Era energía, ahora es corriente corriendo.
Corre por los campos.
Esos que atraen, hasta que uno rechaza.
Y se establece la distancia.

Es en la distancia donde uno se detiene.
Para acercarse o transformase en otra cosa.
Plasmática.
Hay quienes se acercan desde la estancia.
Hay quienes se acercan sin distancia.
Con acercamiento.
Y no miento.
Se ponen tan cerca que contagian de eso que parece lejos.
Entonces está cerca.
Porque alguien abrió la cerca.

El campo atrajo por gravedad.
Se siente natural; ya no es tan grave.
Ni grávido.
Y ya todos estamos embarazados de humanidad.
Aunque nos empeñemos en distanciarnos con los sexos.
Espero que no nos perdamos en este caos obseso.
Y hagamos el cosmos de nuevo.

¡Oh! Es que ya jugamos a reventarnos.
Ya me cansé de ese juego.
Vos te transformaste en guerrera y yo en esclavo.
Qué divertido matar o ser dominado…
¿Hasta cuándo?

Es difícil todo comienzo.
Me enrieda la palabra menso.
Sí, parece ser para entendidos toda nueva creación.
¿Pero que pasa con cada respiración?
¿Acaso no es la superación de un ocaso?

Cada inspiración viene llena de aire y superación.
También de inflación corporal y monetaria.
Para algunas personas es cuestión de herencia.
Se levantan y le ponen números a toda existencia.

Para mí, que soy un desheredado del pasado, la mañana es una novedad absoluta.
El sol o la lluvia me despiertan para decirme que ellos hacen lo que hacen y no les preocupa.
Yo intento entenderlos.
En un lenguaje inventado.
Porque el lenguaje que amaba las cosas, por quedarse en la distancia las ha traicionado.
Así, me quedé sin los hilos que me ataban a los conceptos originales.
Así, me quedé sin los hijos que me atarían a preceptos morales.
Así, intento ser algo sagrado, sin estar bautizado.
Y creer que por toda maravilla soy reflejado.
A toda hora y en todo momento.
Como un trabajo ad honorem en otro espacio tiempo.

Porque en este espacio tiempo estoy afuera, del otro lado.
Me ven dando vueltas por las góndolas y mirando extrañado.
Preguntando dónde está la salida de este gran Super mercado.
Que parece del tamaño de toda mi ciudad.
Tan grande que siento que la caja y el laser me sigue en todo lugar.
Para etiquetarme en el ticket y saberme apreciable, con números cotizables.
En más y menos valor comentable a precio de cambio intercharlable.

[Qué caro salió; o… qué barato lo compraste; o… ¿a ese precio no te lo agarraste?
Nadie lo quiere, está de oferta.
Por internet conseguís algo mejor y menos berreta.
Algo que valga más aunque se le trabe la bragueta.
Que tenga valor de cambio y cuando lo cambies te das unas vueltas.]

No sé, no veo quién me venda.
¿Ya estaré vendado y por eso no lo veo?
Bueno, me dejo de preocupaciones y me voy a comprar algo.

¿Y esto qué es?
Un verso plasmático.
Es una unidad de vida.
Como un molusco o una orgía.
En cierto nivel es lo mismo.
Si hay movimiento, hay vida viva.
Así el verso se construye desde un nacimiento.
Osea: en todo momento.



Y el verso es un paseo que va desde la cama al escritorio.
Agarra una lapicera y plasma su poema.
En ese poema está la almohada vacía y la almohada llena.
El lecho mojado y el lecho arreglado y acomodado.
Hay ácaros y hay cosas más complejas.
O no hay nadie.
En ese verso nacimiento hay un sentimiento.
Que pasó, que ya existe en otro tiempo.
Pero que se intuye todavía latiendo.

Ese es el momento en que se entiende la electricidad.
Esa que da vida a un rejunte de pedazos pesados de otras gentes.
O esa que late en silencio y corre en el viento, en el agua y en todo tiempo y lugar.

Esa electricidad quizá es pensamiento, también.
Y está uniendo al universo en ese mismo momento.
Y une al poema con las pupilas, al iris con la galaxia, al cometa con la pava.
Porque el poeta está tomando unos mates y eso no se escapa.
Nada escapa al plasma.
Queda en el poema plasmada la cebada, la espuma y la chupada.
Chupadas compartidas o solitarias.
Con miradas vacías, quizá también chupadas.

Pero si hay vacío, hay algo de atractivo.
Del otro lado espera el infinito siempre activo.
Y la poesía esperando ser plasmada.
Inquieta o con paciencia desinteresada.
Que aunque el poeta esté dormido y desatento, el poema no descansa.
Y la poesía, que en todo se plasma, sigue hablando de todo.
O de nada; y nunca se agota.

Ni se cansa.

miércoles, 21 de diciembre de 2016

En el muro de faithbuq




Así fue.
Ayer morí. 
Lo hice como una persona
en Siria. Caí bombardeado de mentiras.
(En Siria moriría bombardeado de Verdad).
En Siria moriría en serio, aquí muero como poesía.
Porque la poesía también muere cuando sabe
 de niños y niñas que no sintieron la plenitud de la vida;
 entonces, como yo, la poesía muere con ellos y ellas; 
tratando de cantarles un verso al oído (de Violeta, quizá); 
antes de que cierren sus ojos para abrirlos en la eternidad
 les muestra lo incierto del rocío o la magia de la nieve.
Espero, como la poesía, volver a nacer del amor entre personas, 
o de 1 detalle imperceptible que se transforma en maravilla.
No puede ser el morbo el motor de la vida.
La poesía si así nace, se suicida.
Lo hace amorosamente, dignamente, 
decididamente, como actúan las personas
que creen que la poesía de la vida
 no está perdida.

Así...

Saltamos 
de la mano, 
hacia el silencio.

La poesía sólo me miraba.
Sentí que podía hacerse libro

con una de mis lágrimas, y no: callaba 
y me acompañaba. Entendí su grandesa humana

ante la gente inhumana, me mostró un universo
 de versos gloriosos esperando que callen bombas y balas.

En esos paisajes estelares la risa de niños y niñas brotaba sin rima, 
los adultos sanábamos y volvíamos a ser 1 con la vida, la tierra y la poesía.

lunes, 19 de diciembre de 2016

Mi propio Faithbuq 01


Todo lo que tengo es gracias a vos; lo reconozco. Y todo lo que no tengo, también; y me parece justo.
Como vos, soy un ser oscuro; nací de la oscuridad que hay dentro de un vientre.

[Dije “¡diantres!” al salir, y maldije a todos los que hirieron a mi madre, y tanta luz sentí que dañaba; maldije por la angustia, por la espera desmedida, en ese sanatorio donde murieron mi abuelo y mi abuela, en sofocantes despedidas. (Sólo nací ahí para aprender a dónde no quiero estar)].

Ahora me reflejo con la luz. Veo tu cuerpo.
Veo también lo que está detrás del espejo de tu cuerpo.
Veo tus órganos internos.
Células organizadas que hacen que nos miremos.
Porque yo, al igual que tu, estamos detrás del espejo, también.

{Cómo me costó entender este concepto de espejos. Somos espejos ¿y qué? Puedo decir somos helados en cucurucho… hasta que no llega la experiencia el concepto no ocupa un verdadero lugar en el espacio tiempo.}

https://lh5.googleusercontent.com/-rerybbYlI121o2UJIsu9Ke3PmztVYAR9BBKvwUfbnClOIXw7ShWC3uCYZsyl69-OPtKhgnI39GjBQQePaX7-FLOOzsSfLK5so-NE9o4g0ZYF9N8GvmQJb9ArHWjCubT9MOLn_rJ 

Y en estos momentos, sé que una 3ra guerra mundial se está jugando.
Y surgen los conflictos concretos, en Siria.
Un punto en el mapa de nuestra existencia presente.
Punto bisagra.
Como yo, como vos.

{Existo gracias a una Comunión entre personas trans.
Transculturales, transnacionales, transgeneracionales.
Personas transgresoras de presiones mentales sociales.
Mi sangre es africana, de Siria de Sahara; europea, de Italia; americana, del sur, originaria.
Fruta madura de unión y tolerancia.
 https://i0.wp.com/notas.org.ar/wp-content/uploads/2016/07/Osvaldo-Bayer.jpg?resize=350%2C200
Miedo y Amor, como alquímica sustancia humana.}

Y dice mi no yo Bayer (a-migo Bayer):
A veces siento que nunca aprendimos, les hacemos caso a los demagogos. Yo ya estoy viejo, tengo casi noventa años, hago lo que puedo”.
Y todas las personas hacemos lo que humanamente podemos querer.
Y el presente siempre puede complementar al mayor de los sabios.
Bayer es uno de los pocos magos que vienen enseñando la magia desde la oscuridad del tiempo.
Transformar la realidad.
Detrás del espejo, Bayer se encuentra con su pasado y futuro.
En vivo, en el teatro, en Las putas de San Julián; (las heroinas de ese lugar).
Yo vi su reflejo haciendo la magia y eramos cientos de espejos sentados en las butacas.

https://s-media-cache-ak0.pinimg.com/236x/a7/52/7d/a7527deb74d2c8580359f940aafef1ee.jpg

La negativa de la guerra.
Ese que creó Bayer es otro punto concreto, del otro lado en la 3ra guerra.

Pero ya pasó, para quedarse, la dialéctica.
Ya conocemos los multiversos de la humanidad.
Entonces, que la dialéctica sea poética.
Osea, hay más puntos concretos donde se juega la libertad de la no guerra.

Y llegar primero en el discurso parece ser la propuesta.

Quizá hoy sea mejor renunciar.
Y re anunciar.
Anuncio que: re anuncio el poder.
De completarme.
Desde ahí soy un árbol que da frutos.

{La realidad me vive enseñando todo lo que hay que saber.
¿Qué más?
Pero no puedo ignorar que hay realidades donde la humanidad no interviene.
Por eso son, quizá, inhumanas.
Y en esa realidad inhumana hay animales y plantas; paisajes dados de furia y calma.
De lujuria vegetal y de impotencia frugal.
Y el entre eso, también está, y es tal o cual.}

Entonces está Bayer, y está la revista MU de la coop. La Vaca.
Y los chiste de Sendra por el clarinete ensordecedor de mentes.
Todas se juntan en esta herramienta electrónica.
Metáfora imperfecta de la conciencia humana.
Pero eficiente para intercomunicar conciencia.
La Conciencia sale de la no luz.
Eso que está detrás del espejo.
Lo de abajo del aisber.
Lo que no siempre se enseña a ver, para ver más allá.
Es lo que pensamos que queremos hacer, transmitir.
Transmutar en realidad.

Y hace rato que el norte de américa pelea contra el norte de europasia.
Y la áfrica está en el medio.
Y américa del sur y australia, las dos caras de un mismo satélite (quizá).
http://www.keshefoundation.org/image/neutron/Keshe_nuclear_decay_410.jpg
Y un modelo subatómico nuevo.
Que todavía no lo entiendo porque yo ya soy viejo que camina hacia eso.
Pero que muestra la forma, el diseño, de la mínima partícula que construye todo.
A partir de la poderosa máquina energética que es el instante presente.

(Si quieres una aproximación, multiplica:
E = m . c2
Osea, el peso de todo lo que estás viendo en las cercanias y en el horizonte por 300.000.
Tu mirada evidencia la abundancia del ahora).

Hoy podemos popularmente saber lo que pasa en el lado oscuro.
Nuestra intimidad.
El laboratorio del ser.
Donde Eistein decía que siempre hay que volver.
Desde ahí todo.

Y miremos el dinero.
¿Qué valor tiene cada papel y para qué?
Hay muchas ideas sobre él.
Lo hacen pesado de cargar o de almacenar.
Confunde en el accionar.
Entre personas ¿qué más?
Ve tu reflejo manejando dinero.
Y mira antes de eso: la oscuridad detrás del espejo.
Porque él te conecta con la comida, con el techo, con el sexo.
O el poder. Comunicarse, escuchar, saber.
(Interesante, che).
https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEifK6DAk8EW5EL-8NE6dsLtCCwhbzNT8-0qE4FrUvYTf8bD6DczKg2VlXsRDHWO0V_zD6EpefIgLRt3lFk5qnsd8s-jd5FWIDKMoPFPoNq-XJPWEkFtYLIXresVgstunGjI2xC1G_Txv-Aa/s1600/wreich9.jpg
Su nacimiento lo condena a ser pensado.
Nació de la manipulación.
De objetos y de personas como si fueran objetos.
Porque sus creadores aprendieron a vivir de eso.
Por eso no manejamos el precio.
Del dinero ni de los alimentos.
Aunque sean producidos por nosotros mismos: la especie humana.
Y con el uso de las máquinas.
Y uso y abuso de los animales (conciencia de otra raza de naturaleza orgánica/organizada).

{Que sus alas y miradas nos perdonen.}

Por último la coherencia.
Desde lo fundante hacia afuera o hacia arriba o abajo.
A experimentar y rever.
Y otra vez.
Porque la coherencia de ciertas ideas no sirven a resultados saludables.
Humanamente escribiendo.
Y sólo el poder de la oscuridad sabiéndo darse a luz puede dar dimensión del equilibrio dado.
Poder que se reconose a sí mismo poderoso siendo un presente global en cada instante total.

viernes, 2 de diciembre de 2016

Lo que está en El Juego

Es el juego: la atención.
Jugar es su efecto.
La tensión es la causa.
Lo saben los presidentes de la conciencia.
Esos mandatarios del Oriente no pendientes
del consumo de Occidente.
Este es un mundo donde reina la competencia
tener el 1 o salir primero.
Aquí se quiere instalar juegos nuevos.
Pero el despierto se da cuenta:
Porque en estas reglas nuevas
el que acepta el nuevo juego no cuenta.
El juego es desviar la atención
hacia lograr la mejor competición.
Entonces, el jugar asusta al nuevo jugador.
Porque no tiene las cartas que el juego nuevo inventó.
Las cartas ganadoras, de bordes filosos, luminosos
las porta el diseñador y las da a quienes no quieran
hacerse pasar por inventor, creador, instalador.

Si la atención está en el jugar
la tensión es natural.
Si la atención está en ganar
la tensión es para acumular.

El nuevo juego distensiona
al que la competencia no abandona.
Lo hace por momentos
(fugaces ideas de victoria)
luego tracciona y contracciona:
perder el juego es el fracaso
y la eterna derrota.

No abandones.
Juega.
Pero observa la verdaderas reglas.
Son para todas iguales
conocidas
evidentes
naturales.
No versan sobre males.
Tampoco sobre bondades.
Dicen sintiendo
reconociendo
a veces, repitiendo
pero a otro tiempo
que tu miras
que tu percibes
que tu concibes.
Juega a que reinas y sirves.

M.I.R.


Así es la eternidad: aparece de repente.
Así apareció M.I.R.
Su nombre completo va a quedar detrás de sus iniciales.
Pero es un nombre real
-existirá siempre para quien desee saber su verdadero nombre-.
(También se puede inventar uno si es mucho lío).
Es un nombre de una abuela de barrio.
Trabajaba en el Samco de Santo Tomé, provincia de Santa Fe.
Esta abuela tenía problemas con su nieto
-como le pasa a las abuelas en los barrios en la periferia al centro de la ciudad-; problemas serios, con la policía
(que son los que ejecutan su reprimido poder ahí).
 Y fue por su nieto que la abuela decidió decir algo.
Sin su nieto, la abuela no era.
Entonces, es más: hacer y decir algo.
Por su nieto.
Fue al palacio de tribunales, hasta el segundo piso.

El testigo estima que ahi fue donde la abuela sintió.
Sintió verdaderamente lo que ocurría.
Lo sintió como quien siente que se abre su piel.
Tuvo la certeza de lo que pasa en lo más alto.


La abuela había llamado a las puertas de los más altos,
sin abogado o abogada patrocinante;
lo hizo como abuela.
Caminando por los pasillos,
que unen las polares oscuridades de lo penal
con el polo bien visto e iluminado de las cámaras civiles,
la abuela sintió más frío.
¿Por qué no les llaman también cámaras frigoríficas?
(hubiese pensado si el amor al nieto no le ocupaba todo su ser abuela).
Un frío helado sintió reflejarse en esas personas espejos quietos.
No había derecho que satisfaga la necesidad de abuela:
compartir la vida de experiencia con la vida floreciente del nieto.
Ese derecho no lo detalla ninguna norma.
O no se sabe.
O vaya, o espere, o mire...
O no está señora.
O no se puede ahora.
Pero un pasaje en colectivo no se paga inutilmente.
La abuela fue a decir algo.
Ahora; ya mismo.
La abuela quiso hacer su decir;
desde ahí: desde el segundo piso de las cámaras y juzgados penales.
Quizá lo decidió cuando vio hacia abajo.
Desde el balcón del piso más alto, miró el patio interno
en el subsuelo del palacio.
(Nada que ver con las mazmorras de los castillos medievales).

Ahí deambulan los privados de la libertad.
Y los cercanos al problema del que está en más problemas.
Casi todos fuman;
y miran al cielo para ver la red que va a atrapar su mirada
en el segundo piso.
(Ni un poco más allá podrá llegar).
Y defensores e indefensos hablan con varias personas a la vez;
y siempre alguien fuma.
Quizá vio el futuro de su nieto y se quiso adelantar.
La abuela se subió al balcón y desde ahí dijo todo.
En los juzgados civiles se escuchó un grito sordo, como un portazo
(¿Acaso otro caso de mal humor extracontractual?
¿Alguien que no respeta la investidura y la moral?
¿Un profesional que no se banca la mora judicial?
No).
Era la voz o el grito de la abuela.
(Sólo el piso le impidió impíamente
llegar al centro de la tierra a pedir por su nieto).
Y su grito de denuncia retumbó en todo el palacio.
E, inevitablemente, la escucharon abogadas, abogados y empleados;
médicas, médicos, jueces, juezas y secretarios;
secretarias, policías y condenados.
(Esto podría ser una declaración de alguno de estos últimos,
en un expediente del 2011).
El testigo más proximo le dijo a la abuela que esté tranquila;
que su voz se oyó y que las paredes grises la seguirán vibrando.
Y, mientras la abuela volvía a mirar en qué andaba su nieto,
la médica del palacio prescribia desde 2 metros de distancia:
ya era tarde para la vida -y se autorecetaba-.
Más allá de los 2 metros que la médica establecía: miradas y silencio;
como una escena que no tendría que suceder ni en pesadillas.
La abuela detiene el tiempo, su lengua vibra.
Espacio y vacío pleno de sentido por venir.
Luego rumores de quienes la vieron venir.
El mensaje vino desde el balcón del segundo piso;
y se me transformó la realidad, haciéndola vuelo.
(Dijo otro testigo).

10 minutos después de que la voz  de la abuela sonara como portazo:
la detonante escena final fue maquillada con un intento de reanimación.
(Así nos dejamos convencer).
Y como quien nadie oyó, se siguió operando la vieja maquinaria de repetición.
(Aunque en las crónicas de los despachos temblequeantes
dicen que el rumor del mensaje de la abuela ganó lugar
y se impuso soberanamente por unos momentos
a los cotidianos comentarios
sobre créditos financieros
y ofertas de super
y - por menos tiempo- vestimenta empleada por reseñaladas empleadas).

El acto final del drama
que no formó parte de un guión judicial
fue la rotura de una red social.
Una red que nada puede ocultar:
Sostiene, enrieda o deja callar.
Así, en Santa Fe capital,
una abuela pidió que no dejen caer a su nieto
que le den otra oportunidad.

Alguien que no esperó ninguna investigación dijo:
"Fue de esas abuelas que brindan una sonrisa aunque le falten dientes. Esas madrasas corpulentas que hablan y caminan, llevando bolsas, mandados y más de 60 años detrás de sus pasos. Fue de esas abuelas que crian nietos y nietas que no saben de sus padres o madres; ¿qué pasó con ellos? quizá se perdieron en la telaraña del dinero, del poder, de la necesidad insatisfecha, del goce bobo y/o estrés; o quizá sufrieron alguna caída o gran tropezón que los dejó inconcientes de las necesidades humanas de sus frutos; o que quizá alguien les malenseñó o malaprendieron... qué se yo, señor. Era de esas abuelas que quieren remendar errores; que refritan penas y las vuelven una comida llena de alegría familiar; que enseñan lo que malas políticas quieren desterrar: el oficio de hacer pan, una salsa, aprender cosas nuevas a toda edad, sostener la vida familiar, ordenar, dar, dar, dar y brindar. Era de esas abuelas que necesitan ser escuchadas y ayudadas, sin demora, sin vueltas, sin friocracia estatal, señor".


Algunos datos de: http://www.taringa.net/posts/noticias/6526006/Hay-mas-suicidios-que-homicidios-en-Santa-Fe.html

"El director provincial de Análisis Criminal, Andrés Ferrato, invitó a replantear las lecturas que se hacen sobre la inseguridad en Santa Fe. “Si una persona no valora la vida propia, tampoco puede representarse el valor de la vida ajena; por eso también los homicidios -manifestó-. Esto es realmente preocupante. Y nos lleva a preguntarnos qué procesos hay detrás, que la sociedad ha registrado niveles de violencia como éstos, donde las personas optan por quitarse la vida”.

En un intento por desentramar los factores que pueden desencadenar esta decisión, Ferrato habló de la destrucción de la expectativa y de la esperanza, y de la frustración. “Pareciera que las personas ya no tienen fe en que las generaciones que le siguen serán mejores; no tienen fe en el mañana”, planteó. Y con énfasis, reclamó reaccionar frente a este llamado de atención. “No podemos seguir negando el problema; hay que hablarlo. Negarlo es negarle reconocimiento a una persona que, incluso, a través de la elección de su muerte, quiso decir algo. Negarlo no es una opción. Y desde el Estado hay muchas cosas que se pueden hacer porque los problemas que no se tratan suelen agravarse”, sentenció."


viernes, 21 de octubre de 2016

Todo Presente es de todas.

¿Tan difícil es olvidar lo aprendido y empezar a soñar?
¿Tu intelecto, tu pasado, tu memoria, qué no te deja mirar?
¿Qué mirás?
Tu presente, qué más.
No existe otra cosa. Nada más grandiosa.
Ahí está todo condensado.
Como el universo y el mar y la lluvia, en cada gota de rocío están.
Qué palabras querés cambiar para no decir qué.
Para ahorrarte qué.
¿Un verso?
Si eso es el universo. Que sea el tuyo.
Que sea el mío. El de él, el de ella.
El de todas, si somos personas o humanidad.
El de todos si somos hombres o tenemos entidad.
Diversos versos, múltiples, que hacen lo imposible de nombrar.
Basta de buscar en otros cerebros, en otras mentes.
En el simio, en la leona, o en cualquier animal.
¿Tan poco te valorás?
La palabra humana ¿qué vale más?
Tu mente, tu cerebro; la tuya, la mía, el tuyo, el mío, soportan la vida toda.
Toda la humanidad, ahora en vos. ¿Qué más necesitás?
Cerrá los ojos y escuchá.
¿No la escuchás porque el vecino pone cumbia a todo lo que da?
¿Porque los autos, el barullo de la ciudad?
¿Porque el balancín de la fábrica, porque la panza, porque la soledad?
Un bosque es infinitamente más.
Que todo edificio, que toda universidad.
Una célula madre que potencialmente es neurona, hueso o piel, no puede compararse con ningún motor o chip o pendraib.

Ya sé: no te enseñaron a aceptar ni aceptarte; sólo a escapar del escaparate.
En tu mente se tejió una realidad: la de tu papá, la de tu mamá, la de tu abuela, abuelo, profesor, militar, zar miento, la del  juez, la del fiscal.
Eso también es humanidad ¿o qué te pensás?
¿Que la muerte es un invento para sufrir, para llorar, para volar?
Sentido, conciencia, libertad, humanidad, ponelos y ponelas en tu altar.
Dales un lugar, al lado de jesusito, al lado de marx, de Gandhi, de De La Serna, de Ulianov, o de tu mamá.
Y una foto tuya, que sos lo más.
Sin vos ¿qué?
Sin bosque, qué.
Sin busque, qué.
Encontrá. Ya. Sin teléfono ni güaifai.
Que la Muerte te besa y te casás, por la eternidad.
Y ya no fue.
Ya es ya.
¿Qué más?
Si ya sabés leer y escribir, si ya sabés hablar y sumar.
¿Te enseñaron eso para consumir, para comprar, para financiar?
Sí, pero eso fue.
Ahora estás acá. Presente, nada más.
Ahora ¿te enojás?
Pero eso no se arregla con votar.
Ni con dinero, ni merca, ni fumar.
¿A quién vas a culpar?
Yo cuido a la humanidad de mi ideal.
Hitler, Videla, estaban sostenidos por hombros de millones, cargando ira, frustración y calamidad.
Y la ira sigue pero en mis hombros no la soporto más.
Paz, paz, paz.
¿Dónde está?
Dónde estás.
¿Estás presente?
Y vos ¿estás?

jueves, 20 de octubre de 2016

PARÍ

Soy un PAR: una Persona Adulta Responsable.
También intento agregarle el ser I: Íntegra.
PARÍ.
Y antes que Persona: Humano.
Hache que se dice a sí.
Eso no me lo da ningún código civil.
Es conciencia humana la que hace reconocerme.
Reconocernos, usando herramientas humanas.
Herramientas que me hacen Responder cualquier pregunta.
Sin temor a ser, para construir más conciencia humana.
Y me pregunto: 
¿Se puede escapar a la cultura humana que construye la conciencia?
No. Y sí. También no sé.
Sin cultura humana no esculpiría esta escultura.
Si me mato con una palabra ya no seré en vos.
Si digo no sé, vos me hacés. O me deshacés.
¿Y para qué sirven las herramientas que no son voz ni piel?
Puedo no responder y sé que ya existe una respuesta.
Como sé que una niña, un niño es fruta o producto.
Como sé que puedo apropiarme de tus ojos sin saber nada de tu mirada.
Como sé que hay quienes no sentirían que la vida hace al alma.
Miro esta herramienta intelectual, que dice comprender, que dice aprehender.
Y no dice nada. O dice todo sin saber que lo hace.
Así, por vos, ya no soy PAR.
Porque sé que vos me hacés impersonal, o tres niños hermanos, o 1 palabra impronunciable.
Así, por vos no soy lo que creo ser y pensar de mi.
Porque estás vos con tu mirada que no sé aprehender ni sentir.
Y que dice que me mira y que existo donde no me sé existiendo.
¿Para qué sirven mis manos, mis piernas, miembros que sobresalen?
Puedo responder no sé. O hacer un movimiento sin saber para qué.
Creo existir así pero sé que alguien puede decir con certeza que no sirvió.
Que no sintió una caricia sino temor o vergüenza o una sinrazón.
Entonces ¿cómo es esta construcción?
¿Cómo se hace para no sentir la destrucción de una emoción que creyó ser con razón?
Creo tener todas las respuestas posibles y sé que no sirven.
Porque más allá de mi piel, más allá de mi voz, hay algo incognocible que sos vos.
Y eso que no soy me da una certeza:
Que mis herramientas para la construcción de respuestas son fantásticas y misteriosas.
Que pronuncian naves interestelares sólo para buscarte.
Que dicen puentes para hallarte.
Que nombran soles para iluminarte.
Que susurran viento para alcanzarte.
Que gritan infinito para soltarte y dejarme ir a ninguna parte.
Herramientas humanas que siempre construyen algo más importante.

jueves, 22 de septiembre de 2016

Confusiones 03

Estoy escribiendo.

Un poema.

Sin forma, sin letra.

Un poema vacío.

De palabra y contenido.

Que no dice, que no escucha.

Un poema muerto. Que no habla.

Un poema que no dice nada.

Ni tinta tiene.

Tampoco carne.

Un poema tipo nada.

Un poema sin ritmo.

Un poema sin son, sin ton.

Sin tonada. No lo cantan.

Sin paisaje; ni imágenes tiene este poema.

Ni amor.

Un poema que no siente. Ni hace sentir.

Un poema en el que no pasa nada.

Que no reza. Que no teme.

Que no sé qué le pasa.

Un poema que por no ser nada cree que es.

Un poema que no sabe de infinitos.

Ni de acentos ni de nada.

Que no observa, que no ve nada.

Este poema se ve siendo nada.

Es un poema que no tiene sentido.

Está yendo hacia arriba. Porque no prevé.

No tiene reversa ni reverso.

Ni inverso.

Ni verso porque no es un poema.

Ni risa me da.

Un poema que está muerto pero no de risa.

No hizo ninguna payasada.

No habló de nada.

Y nada(r).

No tiene marca registrada.

No dice Libertad.

Ni tiene mayúsculas.

Que no empieza.

Y si empieza, empieza en la nada.

Y que en la nada se termina. Se acaba.

Y no goza.

Ni desea.

No desea nada de nada porque no mira tv.

Un poema sin internet.

Se hace que es poema.

No es.

Si es, es un poema mediocre.

Pero nada.

En fin:

Y punto.

Nada, Adan.

No te hablé, no te dije nada.

Un poema sin espejos, Adan.

Sin un Adán y Eva.

Un poema sin vos.

Porque el poema no te nombra.

Nada nombra o puede nombrarte; ni a vos ni a este poema.

Es un poema sin despedidas.

Sin nada de lágrimas.

Sin estómago, sin entrañas.

No habla de amigos ni de amigas.

Ni de palabras.

¿Eso ya lo dije?

Un poema sin preguntas, sin errores, sin dudas.

Que si habla, no perdona.

Entonces, es un poema que prefiere callar.

Porque nada otorga.

No da nada.

Ni quita.

Ni.

Nada.

Ni existe.

E.

Es un error.

O nada.

No "oh, nada!".

No tiene contradicciones.

Cree que es de otra naturaleza.

Pero no habla de perspectiva global, ni estrellas, ni lunas.

Es un poema sin dinero, sin valor.

Sin propiedad privada.

Que a todos les causa nada porque no se ve.

Nadie ve en la nada el poema.

Sí, Nadie; puede ser él o ella.

Este poema, si tiene algo, es que no tiene preferencias de género.

Al poema Nadie lo sostiene y muchas personas no lo ven.

Es que este poema no tiene atractivo.

Porque este poema tampoco tiene sexo.

Está trasvestido.

Es un discurso sobre la nada.

Se disfrazó de poema por cuestiones estéticas.

Ya todas las personas lo saben.

Y el poema sigue sin darse cuenta.

Porque este poema no oye los rumores.

Ni de olas ni de alas.

Lo que no dice este poema es una verdad absoluta.

Y nada puede revertirlo.

Porque sólo la nada puede atravesarlo.

Nada de conciencia.

Nada de saber de la experiencia.

Nada de dolores trabajando la tierra.

Nada de nada.

Nada de ideología cotidiana.

Porque este poema no tiene continuidad de ser.

No debiera haber sido poema.

Tal vez niña.

Tal vez feliz.

Pero no habla de felicidad este poema.

La niña fue abusada.

Entonces, nada de felicidad en este poema.

Nada de reparación, tampoco.

Si tal vez niño abusado: que se calle, que no diga nada.

Este poema habla de nada.

Es una calle cerrada.

O da vueltas en círculos.

Sin que pase nada.

Nada lo detiene.

Ni la «d», ni la «g» ni la «i».


La A, quizá.

¡Alto!

A con mayúsculas.


¿?

No tiene respuestas.

El poema, digo.

Mejor:

El poema dice.

Dice: no.

¡Basta!

No abusen del poema.

Ni de las personas.

Aunque el poema sea pequeño, no quiere malos tratos.

Este poema es como un ser que no tiene defensas.

Anda de a pié o en bicicleta.

O usa un colectivo.

Cualquiera que lo piense puede atropellarlo.

A veces el poema siente que existe.

Y mira por la ventanilla o al cielo o a la luna o al sol.

Y el poema cree sentir algo.

Sería como el poema de una persona que calla.

Que no dice que cree sentir algo; porque no sabe cómo.

Sino, habría un poema.

Y este poema no puede decir lo que la persona habla.

Porque no es un dictado.

No hay musas, ni escarabajo dorados, ni violines.

No existe persona que le hable a este poema.

Ni persona a la que el poema responda.

No balbucea.

Y aunque hablase muy correctamente, no lo entenderían.

Es un poema no parlante.

Es un poema delirante.

Sin alma de diamante.

No es un regalo de amante.

Es un olvido sin queja ni nostalgia.

Pero empecinado a etiquetarse poema siendo

pobre y pura

prosaica prosa.

Para la nada poderosa.


sábado, 17 de septiembre de 2016

Confusiones 02

Diles que no estoy, que son demasiados, millones; diles que es demasiado para mi cuerpo, aparentemente sólido, empezar a des aguarse y vibrar como si fuese un chorro contenido en una bolsa de nylon; diles que me fui, que salí, que puse salir de feisbuc y me desconecté; y ahora estoy triste y a la vez eufórico, diles que no sé si enlistarme en el ejército o llorar como un niño; diles que fue demasiada información en el jarwuar, y tuve que salir a dar un paseo; porque ahora no puedo ver a nadie, me siento como un caníbal chupando sangre a toda la humanidad oprimida por darme estos momentos de electricidad y, al mismo instante, en mi sangre se revela un arroyo ubajay de estremecimiento y me siento un rey león del desierto de colores con relaciones humanas que convertirían cualquier selva en polvo, con una mirada o con una presencia de ojos cerrados, pero ahora no sé qué decirle a cada uno de todos los que se volvieron moléculas de mi torrente, o bits de mi disco rígido, o imagen de mis sueños o pensamientos, entonces diles que no me siento, que no me puedo sentar, que estoy enfermo; sí, diles que me enfermé de algo que ellos mismos, mis amigos del grupo del uasap, me compartieron, que me agarré esa gripe D-S-O, o algo A-S-I, y se me hinchó el pié y no lo puedo apoyar, déjalos tranquilos y diles que no tiene nada que ver con mi mamá, ni con nadie cercano; diles que vayan a mi historial, ahí en mi red social, ahí verán lo que publiqué, lo hice ayer, pero ahora no puedo ver a nadie; me agarró mucho miedo, vi muchas palabras con M, mauricio muchas veces, muerte varias, melanoma algunas nomás, vi pocas con B, besos, babita, buendía, bondad, bienestar, cada vez se me ocurren menos, igual ya no sé qué significa cada una, me da igual, miedo o indiferencia, ni sé por cuál actitud decidirme; diles que no me importan ya, que me dan igual, que se exterminen o que se calmen o el presidente o los nadies o varones y mujeres, que me harté de ser un inclasificable sexual, no sé si un pene es una espada de estar uars, o un órgano de conexión mística, o un palo para cachiporrear, tampoco sé si una vagina es algo que da vida, o devora hombres, o produce crías para trabajar, me pierdo en tratar de dar respuestas, son muchas las preguntas que me surgen con tanta infomación; diles que me fui a fumar un pucho, pero que no lo prendo porque ya me hizo mal; diles que estaba confundido, que me fui a pensar, a pasear por el laberinto, ese que nadie se anima a entrar; diles que aprendí a entrar, llegar a su centro y salir en paz; diles que confíen, que sepan qué y para qué esperar, y que se cansen y que actúen; diles que este es mi momento de observarlos actuar, que vivan, que se equivoquen, porque se puede reparar y nada es igual a todo y nada al mismo tiempo, entonces, que se arreglen con su conflicto existencial, porque ahora yo estoy deprimido, no puedo ayudar a nadie porque danié; sí, me danié a mi que soy nadie, porque entre tanto tanto todo, quién piensa en la nada del nadie: nadie y Daniel; si estuviera Daniel, él sí podría pasar porque Daniel es mi amigo, es quien no es yo, a-migo, sin-yo; él existe sin mi y yo existo sin él, por eso sé que él se las puede arreglar si no puedo ayudarlo; es mayor que yo así que existía sin que yo existiera, era su a-migo antes de que yo tuviera conciencia de serlo; eso: diles que son todos amigos de todos pero que todavía no se dan cuenta.

miércoles, 14 de septiembre de 2016

Juan y la Micropolítica 02

Juan estaba cansado de picar ladrillo.
Se había roto la máquina de cortarlos.
Todavía le faltaba hacer las juntas de toda la galería...
Cuando volvió el contratista salió de la obra.
Por un rato; a comprar porrón y un pan.
Le llamó la atención un papel tirado, en la calle de arena.
Leyo y entendió que era una canción:

"Oid mortales este canto que canto
entended la diferencia que tiene con el llanto
aunque si lo oís ya es un gran tanto
si sentís es que no habeis muerto de espanto.

Siempre será así vuestro presente
la confusión reinará en parte de la mente
ahora, no penseis que la mente es 1 solamente
presente, pasado y futuro es infinito eternamente.

Diferenciad entre vuestras herramientas humanas
podés usarlas todas y sólo necesitareis calma
silencio, voz, piel, cerebro y alma
todas creadas por unión de conciencias hermanas.

Se hermanaron para vuestra creación
solas no podían aunar toda la atención
la conciencia es cuestión de con/centración
y es una fuerza que se expande como explosión.

Bienaventurados los coherentes de corazón
dueños del tesoro más valiozo de la razón
es una brújula que guía siempre a la pasión
a cada instante podreis corregir la dirección.

En este mar inmenso cuya lágrima vais conociendo
ya podés intuir que sois mares y os veis creciendo
os espejais en peces plateados que os van diciendo
que sabés todo y la nada que nada os va moviendo.

Si os sentís ahogados puede que simplemente estais cansados
hacéd la plancha, sacudid la arena, sentios calmados
observad el cielo y las aves, escuchad a esos seres alados
cerrad los ojos y oíd este canto que os ha salvado...

estais respirando mar: ¡sentiros alabados!"

Juan no entendió bien de qué se trataba.
Sonrió al terminar de leer.
La chica de la despensa le preguntó por qué reía.
Era por la canción. Es extraña, dijo.
Se la dejó a la chica al irse.
Ella la leyó y, sin pensarlo, le dieron ganas de ir al río.
Lo invitó al novio que no tenía ganas de ir.
Le dejó el papel; que la aguante un rato, ya venía; y se fue.
El la miró con ganas, yéndose.
Leyó la canción sin darle mucha importancia.
Y se puso a inventar una cumbia.
Hizo una letra con algunas palabras que le gustaron.
"Sos la dueña de mi corazón
si tu te vas pierdo la razón
mar y brújula en esta pasión
yo sin vos no tengo dirección".

Historia breve del Infinito 01

Soy el hijo del Sol.
Hermano político de la hija de la Luna.
Ambos fuimos concebidos por el Infinito.
Somos la expresión finita de su creación
de infinitas diferencias.

A mi me corresponde construir
la partícula de luz
entregándome al movimiento
entrego mi cuerpo
al ritmo de las estrellas
cometas, planetas;
entonces, brillo
me deshago en chispas
desparramo tibieza.

Ella me refleja
ilumina el cuarto y la noche
es ella quien me muestra la entrega
al profundo mar de la Eternidad
cuando en sus ojos se enciende la oscuridad
el otro lado del espejo quiere cruzar el umbral.

En un instante
todo sucede
estamos danzando
alrededor de algo inmenso
que nos deja inermes
adictos
alienados
o mejor
llenos de mar
mareados
o mejor
llenos de luna
lunáticos
o mejor
llenos de luz
iluminados.

Y, de repente, algo alumbra
ahora vislumbramos
que nos deslumbra:
piel color arena,
pelo vegetal,
ojos verdemar,
movimiento animal;
fue un remolino mental
no fuimos pensamiento
fuimos realidad
y ahora damos vida
luego de esa fusión vital.

Nunca pensé que fuese tan extenso
el tiempo que viene después de bailar.
Algo se anuda en el tiempo
algo anida a cada instante
algo se crea en ese danzar;
es como que se miran los espejos...
Esto les puedo contar:
que entre la hija de la Luna
y yo, el hijo del Sol,
siempre que nos acercamos
nace una vida nueva e infinita
que gira y gira
recorriendo el Universo
(como nosotros dos).

miércoles, 7 de septiembre de 2016

Luz y Fer 01

- Idólatras del Estado... pobrecitos, les tengo pena...
- Porqué decís eso? no seas tan despreciativo; vos sos parte de ellos, somos; si son probrecitos vos también sos un pobre diablo.
- No piensan... no saben para qué...
- Seguís? Estás siendo cruel ahora, yo también lo puedo ser, sabés? Estamos acá, somos parte y estamos implicados aunque quieras mirar siempre el mismo lado siniestro y oscuro.
- Es que, miralos, po... Poder, Estado, Eternidad... Temen la muerte y no pueden decirlo; son cobardes, se sienten sólos y fracasados.
- Vos estás ciego, men?
- Ja! Tanta claridad te hizo cerrar los ojos, parece.
- Ey! Yo te estoy viendo; y los estoy viendo a ellos, todo el tiempo, a cada instante; no te hagas el tonto conmigo; sé que no sos ningún tonto y vos estás haciendo foco en un sólo lugar para poner tu mirada fúnebre y nostálgica, y vos sabés muy bien para qué sirve eso: sólo para desviar la atención que se dirige hacia la apertura.
- Y vos? No aceptando mi mirada...? eh? eh?
- Estamos dialogando...
- Pero no creas que no soy un ser sensible; me emociono al verlos tan manipulables, y obviamente es una mezcla entre ternura y asco, a veces odio; pero vos lo dijiste: somos parte; y sé que, como vos, puedo ir de un lugar a otro; quizá a vos no te guste visitar ese lugar tan humano, en donde por miedo o confusión se trata de maltratar y confundir a ese otro y, u, otra parte nuestra, como te gusta decir a vos... pero quizá, vos no seas tan sensible como lo soy yo...
- Sólo te muestro que hay personas que valen el infinito a todo instante; abiertas, totalmente, al encuentro con esa otra parte humana o no humana que nos permite esta experiencia; existen! y vos lo sabés sólo que te gusta jugar este juego del perverso, el que hace perder el Verso verdadero.
- Oh! qué poesía tan policía, qué inversión tan prisión, qué mente tan... tan...
- Presente.
- Tan, tan, campana! Ja, ja, ja!

domingo, 28 de agosto de 2016

Con permisooo...

Voy a hablar así, como habla toda la gente acá: sin pedir permiso. Sí: ya no se pide permiso para publicar algo; se manda nomás. Y bueno, la idea es que no sería democrático si no se puediese hacer, o de reprimido si no se quisiese hacer, o, tal vez, la herramienta no cumpliría su tarea de "comunicar" o de "informar" si no se usara para una cosa o la otra. No sé. Ahora no me importa: quiero hablar y que me lean. ¿O quiero hablar y que me escuchen? Quizá. No sé bien qué responderme porque ni estoy hablando ni me están escuchando pero sigo escribiendo por este medio tan... tan... ¿Escalofriante? No es que le tanga, digo, tenga miedo este medio tan.. tan... ¿Plural? Es que hay de todo desde ciencia y tecnología de última generación hasta la geografía mundial actualizada o foros de discusión o porn... o paid... o zoof... o cosas globales que se graban y se comparten por todo el mundo. Medio que no sé bien de qué hablarle al mundo ahora que puedo ser... A decir verdad tendría que tener una cámara de video para ser escuchado. Quizá no me alcanza con esta herramienta. Ya había escuchado yo que la palabra no alcanza. Ya dudo si es palabra, código fuente o qué. Sólo sé que ahora no hay más que una herramienta humana que me conecta con una maravilla que es el No Ser Humano; porque no me engañan: ustedes no están aquí. La energía es conciencia pero no toda conciencia es humana. ¿O alguien piensa que se puede conocer a la persona que hizo con sus propias manos, componente por componente, el teléfono celular o la computadora que ahora nos "conecta"? Pienso que es una ilusión la que quiere sostener esta conciencia de la ciencia máquina y como personas de conciencia humana somos capaces de ser distraídos, y nuestra mirada se va a la luz led. Nuestra herramienta mirada, imagen de conciencia se va a la luz máquina. Y oimos tonos electrónicos y nuestra herramienta oído se aleja del sonido humano o ave. Y nuestras manos teclean más que tocan, y se distraen y teclean y teclean, y no acarician y se distraen y teclean y teclean y click click...

Distancias y Diferencias

Diferencia, cargar y/o llevar la separación.
Distancia, de estar lejos.
Eso pasa con lo diferente
la diferente.
La mirada objetiva
se lanza sobre aquello
que se ve distante.
La ilusión de la separación
el varón que se siente mirando
pasar la vida sin ser partícipe.
La mirada subjetiva
se lanza desde abajo de aquello
que se ve distante.
La ilusión de la fusión total
la mujer que siente que es la vida
sin reconocerse pensamiento
también.
La realidad es un producto
de la conciencia
que es más que pensamiento humano.
Pero ambos pensamos
humanos y más.
Si hablamos de 2
también hablemos de 3.
Uno más otro
da más que esos dos juntos.
La distancia y la diferencia
marcan la necesidad de contar hasta 3
aunque sólo se vean dos
el referente y el diferente.
El referente marca la distancia
el diferente está signado por esa marca.
Hasta que la referencia no esté en ellos
sino en eso que no está presente
pero les dio nacimiento
y los mantiene vivos
habrá distancia para dividir
habrá diferencia para evadir.
La distancia es para crecer.
La diferencia para ver ser.
Ver ser femenino vida
Ver ser masculino mira
ambos hablan
o callan 
la maravilla
o lo macabro.
Ahí nace lo cotidiano
único en cada casa
en cada hotel
en cada hospital
en cada restorán.

jueves, 18 de agosto de 2016

Problemas invisibles

Es terrible, no hay cosa peor. Guillermo corría por las calles sin poder ver la solución. Tampoco podía ver el problema. Ya lo sospechaba desde hacía bastante tiempo: el problema era invisible. Lo anotó en su cuaderno y casi escribe "invencible".


Había leído la noticia poco tiempo atrás: "Científicos descubren cómo hacer invisible objetos". No era difícil hacer la asociación; y su imaginación detrás de bambalinas entretejía los más variados escenarios para adornar su drama. Problemas pintados con una pintura hipermoderna que se le presentan a la noche, en forma de fantasmas; tiraban de sus pestañas para presentarse como actores en una realidad muy nítida, tan nítida como un sueño.


Pero peor. Ahora Guillermo corría por las calles en la realidad de su vida. Los problemas invisibles ya los llevaba consigo. "¿Cómo se lucha con problemas invisibles? No veo variables, no sé cuántos son los términos, siquiera una equivalencia... Tal vez sean palabras; qué lógica tienen, cuán profundo buscan el alba, qué mundo forman...", pensaba en su carrera. Quería que alguien aclare sus ojos como los niños del semáforo aclaraban los parabrisas de los autos... Aquí, Guillermo detuvo su marcha y se quedó parado en la esquina mirando la escena. Autos y niños; conductores y semáforos. Sentía ganas de pintar con pintura invisible autos y semáforos.



martes, 5 de julio de 2016

Jonás y la historia del mundo 01

Sucedió después de estar 3 días dentro del vientre.
Del vientre figurado.
Como un dibujo de sí mismo dentro de un vientre
o como un cuento para niños
donde el protagonista quedó atrapado en una crisálida vegetal.
Algo así.
Y Jonás salió y observó el mundo como nunca antes:
lo observó entendiéndolo.
Entendió todas sus conexiones.
No entendía cómo no pudo entenderlo antes.
Parecía tan simple.
Todo comenzaba con un niño o una niña.
Que, obviamente, tenía madre y padre.
El niño o la niña quiere algo
y se lo pide a su madre.
La madre se lo puede dar
mientras el padre no interfiera.
El padre interfiere
cuando la madre necesita
lo que le falta
porque el niño o la niña
piden algo que ella no tiene por sí misma.

En ese lugar
Jonás se ríe de la idea de lo eterno
veía delante de sus ojos
las nubes cambiando de forma
las ramas moviéndose.
La realidad nunca tuvo secretos
las personas sí.
Porque no saben ver lo sencillo
del mundo que no es humano.
Muchas personas prefieren
ver lo complejo
del mundo de las fantasías personales.

Desde ahí se ve la guirnalda
que conforma todos los universos
que conforman la red
la pantalla
el tablero.

El padre interviene y decide.
Complementarse.
O Dividirse.
Elijo, dice.
La madre no entiende.
El padre inicia otro sueño
hacia otro lugar
con otra madre
con otro hijo u otra
hija.
Elija: hijo o hija.
Tiene una hija.
Él quería otro hijo.
Elijo hijo, dijo.
No fue así.
Algo escapaba a su control
no entendía.
La madre tampoco sabía
que sus pensamientos
de odio
ira
confusión
generaban la sombra
en los sueños del padre.

Son miles, como leds.
Son constantes como la electricidad.
No se sabe bien dónde empiezan
ni dónde terminan
como los ríos o los mares.
Los universos no tienen porqué acabarse
ni extinguirse
tampoco la conciencia.
Jonás se encontraba pensando
y qué más podía hacer la conciencia
que existir moviéndose
entre todos los paisajes.

El padre se encontró odiando
a la nueva madre
amando a la hija
olvidándose que odiaba
y amaba
su propio sueño.

No quedaba otra
si el padre le hubiera dado
lo que necesitaba la madre
para satisfacer a esa otra vida
ese círculo complementario
se sucede y no se corta.
Las necesidades nuevas
del tres
se resuelven
uno más uno.

El padre era uno.
En su sueño eran tres.
La madre era una.
El hijo era otro.
La madre amaba a su hijo.
Porque así era dos.
La madre odiaba al padre dormido.
Porque así era dos, también.
Dos y dos eran cuatro.
Y ella podía sola con eso
que le era desconocido.
Y así se desconoció, también.

El padre sueña que muere
solo
porque la nueva madre lo había abandonado.
Su hija había elegido soñar
quizá ella elija un hijo
pero lejos de él
que se convirtió en un padre posesivo
celoso

Jonás supo
que el padre en algún momento despierta.
En ese momento
siempre se vuelve a elegir.
El padre y la madre.
Dividirse o complementarse.
El hijo... elijo...

Elijan, dijo Jonás.

miércoles, 29 de junio de 2016

Lee Moss

Lee Moss.
Todo el tiempo.
Lee lee todo el tiempo.
Lee es todo el tiempo.
Moss es su apellido.
Todo el tiempo también tiene apellido.
Y Lee Moss es él mismo todo el tiempo.
Y su apellido se lee Moss.
A él se lo puede ver en un celular.
O en un tv.
O en un computador.
Él está todo el tiempo.
Es Lee Moss.
Lee porque le gusta leer.
Tiene todo el tiempo.
Lee Moss no trabaja.
Él es todo el tiempo que quiera.
Entonces, Lee prefiere leer.
Se lee a él mismo.
Todo el tiempo.
Entonces el tiempo a veces se nubla.
Otras sale el sol.
Lee se enfada con lo que lee.
O se ríe.
Se divierte y se informa.
El tiempo se deforma y Lee más.
Se lee.
A sí mismo en el tiempo.
Se repite y se deforma.
Se repite y se destroza.
Se repite y se dextrosa.
Se repite y se glucosa.
Se repite y se glaucoma.
Se repite y se degrada, se recicla, se transforma.
Se...
Ser...
Sé...
Sé ser.
Sé ser y leer.
Sé ser y leer y escribir.
Sé que Lee Moss no es quien me lee.

Marea

Me marea esto de ser 2.
Causa mareas y torbellinos.
Arrebato muscular.
Causa terremotos y desmoronamientos.
Ausencias sin explicar.
Me mareo, me confundo.
Esto de fundirse y ser 1
siendo 2.
Y punto.
Ya no se hable más.
Somos 2. Y punto.
Eso, pero ese punto está de más.
Seríamos 3 y eso es demasiado.
Me suena a negro, oscuro.
Poco claro.
A ver... haber... qué le vas a ser.
Si Dios es blanco.
Como el jabón en polvo.
O el pan o el jabón, también.
Vos sos 1 y/o yo soy otro.
No es una pregunta.
Es una afirmación.
Con vos: con-firmación.
Porque estás ahí, del otro lado.
¿Cómo que yo soy otro, también?
No, yo soy 1.
Vos sos otro.
No, tampoco soy tan egocéntrico.
No soy El uno.
Soy el 1 nomás.
Ni menos.
Pero me mareo.
El 3 me da vueltas.
Me hace E.
Error. Un 3 al revés.
E> <3 p="">¡Me violento!
...
Golpeé a alguien recién.
Recién ahora puedo escribirlo.
Porque antes estaba golpeando.
Ahora estoy escribiendo.
Es verdad.
Lo juro por Dios.
Soy ateo pero es verdad.
Juré por Dios para darle énfasis a mi aseveración.
Sé que estoy escribiendo pero he golpeado.
En pasado, pero ahora necesito ser juzgado.
Por el otro.
Que me diga que soy 1.
Y soy culpable.
Y él, que se sabe otro, me dice:
culpable.
El otro 1 me observa.
Me ha visto terremoto.
Me ha visto siniestro y sombrío.
Como tormeta brava.
Pero es por su unidad.
Me confunde su querer ser 2.
Me marea el movimiento.
Su avance me violenta porque me desgarra.
El 3 amenaza con descuartizarme.
Y manos y piernas por sus lados.
Me amenazan que no podré subir andamios.
Que no podré escribir, ni dejar huellas en el barro.
Perdóneme.
Dios.
1, 2, 3, 4.
Deshaga todo Dios.
Todo número, todo cuadrado.
Todo triángulo, deshágalo.
No quiero aceptarlo.
Ningún lado.
Nada de asimetrías, tampoco.
Simetrías, sí.
Asimetrías, no.
A = no.
No simetrías.
Digo, o quise decir, sí a las simetrías.
Mejor sí a las matemáticas.
Mejor sí alas.
Mejor sí.
Mejor.


domingo, 26 de junio de 2016

Com-parto complementario

Soy persona.
Así dicen los Códigos.
Así soy, también, 7.000.000.000.
Y puedo decir familia
y sin decir absolutamente nada
aparecen millones de parientes desconocidos.
Sus vidas dependen de mi
y yo me responsabilizo de sus vidas
y no me importa que sean millones
porque sin decir absolutamente nada
puedo hacer aparecer la palabra par.
Y pueden ser un par de personas
o un par de palabras.
Rosa y yo.
Personas amorosas.
Amor responsable.
Somos muchas.
Las palabras, digo y me digo.
Así crezco y crecí gracias a ellas.
Las personas, digo y me digo.
Y me enseñaron que infinito no tiene acento.
Y supe por mi persona que infinito sí tiene acento, también.
Entonces, en la no escuela aprendí a jugar a las cartas.
También ahí aprendía a leerlas como se lee el mundo diario.
Es una carta al revés.
Un acento mal puesto.
Un idioma hasta el momento desconocido.
Una costumbre mal interpretada.
Un hacer que no sabía de no haceres.
Una coma olvidada.
(ser o no ser)
Una pregunta que se temió hacer.
(esa es la cuestión)
Una respuesta que por salir apresurada no transmitió certeza.
Una relación que por falta de tiempo devino en desconfianza amorosa.
Es una noticia desconocida por la mayoría.
Una fotografía que se confundió con la continua realidad.
Tan simple como la palabra complejo.
El diario mundo de las personas
o el mundo de las personas en el diario
o de las palabras diarias del mundo
o el mundo diario de palabras...
Es sólo eso
juego de personas niñas
olvidándose de sí mismas
Personas
Amorosas
Responsables
Todas
O nadie.

jueves, 16 de junio de 2016

Observación del silencio

Todavía creo en el silencio.
Creo que ahí se esconden todas las voces.
Dicen todo lo que hay que saber.
Si nos detenemos a escuchar

sabremos lo que hay que hacer.
Porque no hay que saber nada más.
No hay que llegar a ningún lugar.

Estamos en el único lugar que se puede estar.
En un mar inagotable de silencios diferentes.

Un silencio para cada ser.
Un silencio que une todas las palabras.

Un silencio con todo saber.
Un silencio respetuoso de la verdad.
Un silencio que cree vivir en cada sonido.