Conciencia permacultural

Conciencia permacultural

Este manifiesto, como producto de la conciencia que asume el error profundo como motor del aprendizaje, en su desarrollo exnihilo se encuentra con el concepto de (y con la) impermanencia. Ahora, en un instante global de aldeas mediadas por la herramienta iónica/electrónica (que tiene influencia en el movimiento natural de atracción y rechazo de todo cuerpo -llenos de cationes :+ y aniones :-).
Desarrollar esta idea de impermanencia es, al mismo tiempo, negar este desarrollo para demostrar por relación contraria, su poderosa influencia en lo profundo de la humanidad; este concepto es tan poderoso, que transforma mi propia esencia humana para decidir sostener esto que es: pudiendo ser espacio vacío, ahora mirando.
Es decir (y desde la impermanencia no digo nada), que haciendo este material de ensueño que dura noche/s o día/s, sé que estoy haciendo una Nada; decido ser con conciencia de servir a la nada.
Antes de 'hacer esta impermanencia' (para demostrar su sentido práctico), practiqué una postura de meditación al estilo zazen. Esta práctica puedo definirla como conectar nuestro ser con lo que no hace nada -o hace desde nada-, a través de la decisión con ayuda de la voluntad, de detener nuestro cuerpo; es detener nuestro movimiento físico haciendo un no-hacer (para el intento), y así observarnos siendo testigos de nuestro ser como parte voluntaria de una quietud, (como la que existe también en el océano); es vernos experimentando la observación del silencio (como el que existe entre el fin y el comienzo de los pensamientos en nuestra mente particular, o como el espacio vacío entre palabras, o entre líneas, o entre txt...) ... el cuerpo, y el ser como su contenido, adoptan una postura y posionamiento particular entre las otras tantas posturas y posicionamientos de las personas humanas.
-En el caso de la postura de meditación, existe también, una postura interna (que para diferenciarla de la postura externa, puede llamársele posicionamiento)-.
En síntesis: a través de la meditación, se dio el contacto con la urgencia de este manifiesto, ya que a través de ver lo inevitable se toma conciencia de la trascendencia de la expresión de la existencia humana; esta existencia es esencia que fluye eternamente por todo cauce en la Tierra.
Cada existencia con su particularidad (en interdependencia con todos los elementos observados por la Conciencia) tiene su propio potencial y desarrollo de acceso a la lógica; ésta, es el enlace iónico para conectar con lo transpersonal, lo que interconecta las existencias a todo nivel.
En lo particular: como cualquier artista observa e interconecta la experiencia como material para su obra, o cualquier persona repasa mentalmente y organiza el orden y ubicación de los ingredientes de su comida de todos los días.
Aquí, es el cuerpo el soporte orgánico, íntegro y coherente para producir algo más allá de nuestro cuerpo humano como es el espacio interno, para la generación del pensamiento (y asi, también enlazarse, o ensalsarse, con la idea del tiempo); tanto el vacío como el pensamiento se mueven con otras reglas diferentes de las materiales. Podría decirse que la condensación y expansión en la multidimensionalidad es la regla iónica, dualidad y transformación es regla en la realidad simbólica/molecular (como la palabra, o como lo orgánico invisible a simple vista),  y respuesta y materialidad lo es en la realidad física particular; todas conviviendo en el mismo instante presente, entre los diferentes espacios vacíos que deja cada forma en su nivel de vibración.
Más claro? esperá planchado que todo el peso de la materialidad se aliviana cuando, inevitablemente, se filtra la lógica del vacío conteniendo la forma y estructura de todo el espectro conocido y por conocer, y no.

EL MIEDO y su función es el siguiente tema